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Llegadas estas fechas, todos los años algunas personas me indican que quieren invertir algo de su patrimonio en CFDs, a ver si sacan jugosas plusvalías. La renta fija cada vez produce menor rentabilidad y la bolsa, me dicen, tendrá que bajar en cualquier momento ya, vistos los niveles actuales. Por tanto la alternativa está en los CFDs por cuanto que uno puede operar en forex o en renta fija o variable o materias primas y entrar tanto si sube como si baja el mercado.

Mi respuesta llega a ser casi automática: los CFDs son productos financieros de elevado riesgo, derivado de su apalancamiento; son la parte más arriesgada del espectro financiero y uno no debería entrar en ellos sin conocer, evaluar y limitar este riesgo. El conocimiento y evaluación del mismo se realiza personalmente y de la mano de los profesionales del sector, particularmente de los que son reconocidos en los mercados financieros como conocedores en profundidad de estos instrumentos y de su operativa entre inversores privados.

Lo primero, la formación.

Es un proceso que no termina nunca y que se mueve al ritmo de cada uno. Hay que conocer qué mercados financieros hay, qué diferencias existen entre ellos, qué herramientas se usan para interpretar sus movimientos, cómo se opera en CFDs sobre un determinado instrumento financiero y qué representa cada operación y cada importe invertido. Una formación básica capacita para una operativa básica; una formación más completa permite moverse con otra perspectiva en los mercados, siempre con el riesgo delante de uno.

En lo que respecta a la formación, al margen de lo que uno mismo pueda buscar en Internet o en la bibliografía del trading financiero, hay educadores que bien gratuitamente o pagando una matrícula ofrecen los primeros pasos en el mundo del trading. Ya fuere acudiendo a seminarios gratuitos como a los que tienen un coste, vale la pena frecuentarlos porque incluso los instructores menos capacitados arrojan datos válidos para los que se inician. Y los profesionales de la enseñanza, además de aportar esos datos facilitan su digestión por los alumnos y su integración en el tejido de conocimientos.

Lo segundo, la disciplina.

Sin disciplina no merece la pena operar en CFDs porque no seremos capaces de analizar las oportunidades del mercado y aprovecharlas. Además, la disciplina impone aceptar pérdidas en algunas operaciones para poder seguir operando. La pérdida es intrínseca a la operativa y aquellas personas que no pueden evitar querer mantener las posiciones incluso con grandes pérdidas latentes pensando que el mercado volverá a su favor, acabarán descapitalizadas. La disciplina es la que uno se marca para operar sólo en unas horas determinadas y sobre unos instrumentos concretos pero además con unas condiciones precisas (capital, riesgo, pérdida aceptable).

Lo tercero, un sistema.

Sin un sistema de trading el inversor está a merced de los vientos de los mercados. El sistema precisa en qué situaciones entrar a operar, en qué mercados e instrumentos y con qué importe. También identifica los niveles para las stop de pérdida y para los cierres de órdenes con ganancia. Pero el sistema hay que ir modificándolo de vez en cuando para adaptánolo a las cambiantes condiciones de los mercados. Algunos sistemas se basan en el análisis técnico, otros lo hacen en los soportes y resistencias en los que se apoyan los precios, otros miran el volumen, otros más la tendencia inmediata y muchos observan los datos macroeconómicos como señales de entrada y salida de los mercados.

Lo cuarto, retirar ganancias.

Las ganancias latentes de una operación hay que considerarlas como reales y actuar aplicando un límite en el que cerrar la posición y obtener esa ganancia o colocar una stop dinámica para aprovechar la tendencia a favor de uno, pero siempre obteniendo un resultado positivo. Cuando esos fondos están ya fuera del mercado, retirar siempre una parte o todos, para evitar caer en la tentación de pensar que si con poco se ha conseguido X, con un poco más conseguiremos XX. No funciona casi nunca y no merece la pena probar si la fortuna sonreirá,

Y por último, ignorar a los «expertos».

Los que tienen sistemas infalibles, los que saben anticipar los movimientos de los mercados con precisión, los que obtienen resultados impresionantes en poco tiempo, son lo que llamo «expertos farsantes». Un verdadero experto ciertamente interpreta el comportamiento del mercado e identifica tendencias o finales de tendencias, pero es imposible hacerlo bien ni siquiera 8 de cada 10 veces  constantemente y mucho menos siempre. Es habitual equivocarse, porque no es posible conocer todos los parámetros internos y externos que hacen moverse a los mercados. La experiencia dilatada y el estudio intenso proporcionan herramientas sensibles para interpretar, pero no son infalibles. Y aún menos hay que fiarse de los que cobran por facilitar pistas para un trading efectivo. Si son tan buenos, ¿para qué necesitan cobrar por explicar lo que hacen, cuando podrían vivir lujosamente con los réditos de su propia operativa? 

Hay mucho trabajo por delante cuando uno decide entrar en el mundo del trading en CFDs. Es muy divertido apasionante y con estos cinco elementos citados bien presentes, también podrá ser muy positivo, pero pide una dedicación intensa, como una profesión más sin duda.

Acabo este comentario insistiendo en el riesgo porque es mi obligación. Los CFDs son instrumentos financieros de elevado riesgo y no son adecuados para todos los inversores. Producen espejismos, como obtener una ganancia equivalente a 10 veces lo invertido en un mismo día y creer que ese espejismo durará todos los demás días. Uno no debería invertir en CFDs más que el dinero que puede permitirse perder sin que duela el bolsillo si esto ocurre. Y acudir siempre a un broker serio de CFDs, de esos que se anuncian poco en lugar de los que aparecen en todos los carteles y todas las webs financieras, porque el broker serio crece más con el boca a boca y el que busca el pelotazo rápido lo hace gastando dinero a mansalva en impresionantes campañas publicitarias.que le permitan captar un gran número de clientes a los que nunca dará un servicio de calidad porque no le interesa.

Suerte a todos los que queráis entrar en este mundo de los CFDs. Nos tenéis (ETX Capital) http://www.etxcapital.es a vuestra disposición.