La importancia de la formación en el trading financiero


Para disfrutar del trading hay que conocer bien cómo funcionan los mercados financieros y tener una buena experiencia.

El conocimiento se va adquiriendo a partir del estudio sistematizado de los elementos del mercado (productos, dinámicas, herramientas de análisis, historia de los mercados, tendencias) ya sea acudiendo a cursos y seminarios o navegando por el mundo de Internet.

Cuanto más estructurado sea el proceso de formación, más se obtiene de él. Es mucho más útil seguir un curso o serie de cursos que ir saltando de una a otra materia en función de la apetencia en cada momento, porque la estructura va organizando la información y montando un marco de referencia cómodo en la mente.

Aún así, el conocimiento no lo es todo. Hay que ponerse a operar para aplicar esa formación a una práctica continuada. Entonces es cuando todo empieza a tener sentido. Aunque sin el otro sentido, el común, tampoco es suficiente.

El sentido común establece una disciplina, una manera de analizar los mercados y de identificar los mejores momentos para operar. En ocasiones no los hay y no se opera; en otras, se impone una racionalidad en el establecimiento de los niveles de entrada y salida. Alguna que otra vez, las menos, todo se ilumina y se ve el mercado claramente, ya sea porque muestra una marcada tendencia o porque el indicador que estamos usando es de libro en esa ocasión. Es un triunfo, pero los traders ganadores no van de triunfo en triunfo, caminan paso a paso aprendiendo todos los días de sus aciertos y errores. Van montando una experiencia, conociéndose a si mismos y desarrollando una sistemática que les permite obtener beneficios materiales … y psicológicos.

Llevo 36 años directamente relacionado con el mercado financiero; 22 de ellos operando personal y profesionalmente y siempre complementándolo con mi otra pasión, la formación, en este caso, en los mercados financieros y el trading.

Creo firmemente que invertir en formación es muy rentable. Nos enfoca, nos evita muchos charcos que de otra forma no veríamos hasta que estamos en él hasta la cintura y especialmente, nos incorpora los conocimientos y la experiencia del formador. Y esto tiene un valor que va más allá del precio del curso o de las clases particulares.

Un educador profesional buscará concentrar en pocas sesiones toda una vida de búsqueda y de asimiliación de datos, conocimientos y experiencias. Algunas personas necesitan más y otras menos, pero el profesional de la formación tiene como meta alcanzar el objetivo marcado en cada caso, su satisfacción va en ello.

En el mundo de la formación pasa lo que en muchos otros, que surgen espontáneos que venden imagen pero no sustancia y acaban emborronando el paisaje. Pero si alguien dice que su historial de trading es de tres años y que tiene una fórmula alquímica para hacerte ganar dinero, sal corriendo por el otro lado. Lo que busca es tu dinero, obviamente, y conseguirá hacerte perder el tiempo.

Por último, la formación gratuita puede ser útil. El educador la usa para darse a conocer, o para invitar a los que le atienden a entender alguno de sus métodos o para presentar alguna herramienta o plataforma de trading que pueda representar. Siempre se aprende algo, a veces un repaso de lo que se supo en un momento y se olvidó, en ocasiones muchas cosas nuevas o un sentido diferente de operar.

Sin embargo, la formación remunerada, de la mano de un profesional que combine una dilatada experiencia en el trading y en la educación, es oro en polvo. Y vale la pena probarla.

Cuando quieras, cuando te interese, te ofrezco mis conocimientos y mi experiencia, como lo vengo haciendo desde hace mucho tiempo con miles de personas. A tu disposición. Me apasiona formar a los traders, ayudarles a mejorar sus enfoques, a domar sus indecisiones y pasiones y potenciar sus talentos.

Cursos como el de Trading Financiero de la UNED que lleva ya su octava convocatoria jubto con mi buen amigo y sobresaliente profesional Melchor Armenta. En este curso que entra en septiembre, hemos desarrollado además otros módulos más concentrados, de 7 sesiones cada uno, con un enfoque intensamente práctico, también auspiciados por la UNED. Y clases particulares presenciales u online, en función de los requerimientos personales. Acude a los profesionales. Merece la pena.