Hay días en que Málaga se pone el traje de vanguardia y se convierte en el epicentro de la agricultura futurista: la Expo AgriTech 2025 no solo trae 7 millones de euros bajo el brazo para la ciudad, sino que además nos sugiere que los tractores ahora pueden ser casi cyborgs del campo. Eso sí, todo muy chic y “4.0”.
Ahora, pongamos un poco de ironía en el reloj: mientras unos innovan, otros siguen jugando con la manecilla del tiempo. Resulta que el cambio de horario, ese viejo amigo que nos desordena el sueño dos veces al año, ya nos cuesta productividad y salud. Como quien dice, mover las agujas no nos ahorra ni un eurillo, pero sí nos regala ojeras y despistes.
Mi toque final: lo bueno de estos vaivenes es que nos dejan espacio para dar el “empujoncito” positivo. Podemos reírnos un poco del lío horario mientras alentamos a la gente a abrazar la innovación agrícola y las buenas ideas para seguir adelante.
Al final tendremos a un gran «Mayordomo 4.0» del que dependerá una multitud de agentes subalternos, cuatro robots limpiadores, 2 cocineros, 1 técnico reparador y su asistente, una maquilladora, un ayuda de cámara, una baby sitter de plástico y electrónica, dos secretarios para componer las tareas profesionales, rtc… pero esto es carne de otro almuerzo, ya hablaremos de ello.
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