No soy un completo idiota, me faltan algunas partes

Mi amigo Jim, del que ya he hablado en alguna ocasión en este blog, lo dice de él, pero incluso lo explica a continuación, detallando aquellas incapacidades mentales que, en su criterio, no ha desarrollado. Y es que Jim es el rey de la ironía y el sarcasmo positivo.

Esta frase me ayuda a entender a parte de nuestra clase política cuando les da por intentar justificar su sueldo, cosa innecesaria por otro lado, ya que el colchón del Estado ya está adquirido de por vida.

Gracias a varios de nuestros representantes políticos, no echo de menos el programa «Había una vez un circo», de la básica pero esencial TV de nuestra infancia y adolescencia. Me entretienen, me divierten, incluso en ocasiones me provocan carcajadas incontrolables.

Solían irritarme enormemente, me provocaban desprecio cuando se ponían a insultarse en el Parlamento o ante los medios, cuando mentían sin parar, cuando el «y tú más» desviaba la atención.

Ahora no.

Bueno, ahora siguen igual, pero me divierten.

Los he colocado en el sitio que les corresponde, en mi comprensión de nuestro ordenamiento de funcionamiento social.

Son los Gaby, Fofó, Miliki, Milikito, Fofito de nuestra vida.

Entretienen.

Y eso es lo que importa.

Gracias chicas, chicos, chiques, chicus, chiquis y todas las demás letras.

O todos los demós letros, para hacerme el lenguaje inclusive.

Deja un comentario