El 1 de abril es el día de los inocentes en el mundo anglosajón, como el 28 de diciembre en España.
Hemos visto noticias alucinantes, como que youtube cerraba o que a partir de ahora sólo iba a ser gratis escribir en Twitter con consonantes, teniendo que pagar una cuota por usar las vocales, emulando al hebreo o al árabe, por ejemplo.
Pero nuestros políticos no iban a ser menos y han publicado que los yogures ya no tendrán fecha de caducidad a partir de ahora.
La verdad es que yo siempre abogué por esta medida. Los yogures siempre sabían mejor cuando estaban caducados, por mucho que les fastidiara a mis cuñados, que un día antes de que caducaran se deshacían de ellos, por si acaso.
Por eso doy las gracias hoy al ciudadano Arias Cañete, a la sazón Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de nuestro electo Gobierno.
Primero, por darme la razón en este asunto que llevo defendiendo hace más de veinte años.
Segundo, por esta ingeniosa broma que nos ha regalado casi en el «Fools’ Day» (el Día de los Inocentes).
Tercero, porque en caso de ir en serio, ha desmitificado la caducidad del yogur hoy y mañana será el pescado, la carne o los huevos. Por Real Decreto los alimentos ya no caducan, cosa que supondrá un inmenso ahorro en consumo a nivel nacional. Después de todo, ¿no se lleva décadas enviando a África las latas caducadas del primer mundo, para alimentar a los que padecen hambre?
¡Hurra por el ciudadano Arias Cañete!
El Mundo del Trading en los Mercados Financieros 